Se me hace tan habitual aparecer y desaparecer por internet. Hace un tiempo, prácticamente, no podía vivir sin internet. Cada cosa que hacía, cada foto que tomaba o cada cosa que buscaba por las galleries... iba a algunos de mis espacios en internet. Y ahora, no sé qué es, pero ya no tengo esa necesidad imperiosa de mostrarme tanto en la web. Sí, posteo bastante seguido en Tumblr (aunque ahora hago más reblogs que otra cosa), pero no van a encontrar algo sobre mí específicamente. Por suerte, la época de Fotolog ya pasó. De todas maneras, las últimas veces posteaba prácticamente lo mismo que ahora hago en Tumblr. LiveJournal... a veces tengo ganas de postear muy seguido, pero no puedo. Todo lo que tengo escrito, está en otro journal semi-secreto. Y este blog, es como más random. Pure randomness. Eso me copa. Poder escribrir sobre cualquier estupidez.
En fin, a pesar de no estar trabajando o estudiando por el momento, tengo la semana bastante ocupada. Sólo los jueves estoy realmente libre. Y ahora nos estamos encargando de ver con Mariano y (ojalá se dé) con Lore. Le voy a decir Lole; me gusta más. Tarde de pelis. Reserva ecológica. Buenísimo.
Y este finde, estoy entregadísima a mi familia. Después de diecisiete años, mis abuelos se vuelven para sus pagos. Ya no verlos los domingos a la noche. No más meriendas exquisitas a la tarde. Ya los estoy extrañando y no quiero que se vayan. Los necesito demasiado. Espero poder verlos pronto; ir a visitarlos o que vuelvan. Siento como que este último tiempo no pude aprovechar el tiempo. Fueron días largos sin verlos ni saber de ellos. Ahora me acuerdo de la última charla que tuve con mi abuela. Después me abrazó y, fuck, cómo necesitaba ese abrazo.
Y me cansa salir los días de semana a lugares que no le encuentro sentido.
Au revoir.
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